Ya tenemos plan

En esto que estaba uno un poco noqueado, en ese estado un tanto catatónico que le deja a uno pasearse por el centro de Barcelona en fechas de frenesí consumista, cuando va y el Parlamento vasco va y aprueba el Plan.
La hábil maniobra de Otegi y de los suyos - formación con la que, aclarémoslo de antemano, no me ata filiación ni simpatía alguna -, deja a Ibarretxe y al resto de jelkides sin programa político para las próximas elecciones vascas. Porque... ahora que se ha aprobado el Plan, ¿como van a enfocar sua campaña Imaz y compañía?
La cabra tira al monte: de momento el PP - voy a pasar de enlazarlos, que leyendo algunas declaraciones suyas ya me han puesto de mal humor y eso no estaba entre mis buenos propósitos del año - ya se apresta a pedir tribunales de por medio. Supongo - hace algún tiempo que, por higiene mental, los ignoro - que sus corifeos mediáticos serán más atrevidos y hablarán de pogromos - lo que harán los malos - y tanques - lo que harán los buenos -, entre las lindezas habituales. Desde el socialismo, cuando menos del gobernante, parece esperarse a su tramitación parlamentario y Zapatero haría bien en tratar de escurrirse del abrazo de oso de Rajoy y sus secuaces.
El Plan parece que sólo contará con los votos a favor de los nacionalistas, algunos lo harán por convicción ideológica - ERC y BNG - y otros - como CiU - porque esperan salir revitalizados del follón que puede montarse.
Que esa es otro: se da por supuesto que habrá follón. Ya hay quien resucita el fracasado espíritu de entente Mayor Oreja - Redondo Terreros, si bien nadie los echa de menos, porque en los dos campos que los representan ya hay quien coge el testigo: en el PP, puede ser cualquiera que agarre el micrófono, mientras que el PSE cuentan con la siempra indómita Rosa Díez. No sería bueno regresar a aquellos tiempos de convulsión dialéctica y manipulación mediática. No se puede responder a un plan político con amenazas con recurrir a tribunales o al ejército, sino con política: diálogo y negociación. Los hay como Haro Tecglen que creen que el Plan fracasaría en las urnas.
Mientras tanto, a los aficionados a la política tal vez nos espera una etapa apasionante de réplicas y contraréplicas valientes e imaginativas, independientemente de la posición ideológica desde la que se lancen. Aunque mucho me temo que, como de costumbre, la clase política española nos obsequiará posiblemente con una nueva entrega de demostraciones y soflamas patrioteras de baja estofa que, en el mejor de los casos, tal vez nos hagan reír. Y los catalanes además con el aliciente del Estatut que se está cocinando ahora mismo, y de cómo afectará todo lo que desde ahora pase. Ya sé que dirán - si no lo han dicho ya - que tal proceso no tiene que verse afectado por otros, pero lo hará, porque variará seguramente la dinámica de los partidos.

Ahora mismo escuchando: la recopilación de 20 de las mejores canciones del año - pasado - que se ha montado, como de costumbre la revista rockdelux. Que ya tienen presencia en Internet, un poco deslucida, pero presencia al fin y al cabo.