25 de abril de 2009

Sant Jordi 2009 (I) - Gabriel Chevallier


Uno de los dos libros que Susana me ha regalado este año por Sant Jordi es éste: El miedo, de Gabriel Chevallier (Editorial Acantilado). No conocía ni el libro ni al autor, aunque luego he leído en la solapa que Chevallier también escribió Clochemerle, que adaptó la BBC en forma de serie televisiva, y que creo que cuando era un niño, alguna caja de ahorros regaló el libro - recuerdo su lomo verde - a mis padres, precisamente por la festividad de Sant Jordi. Cuando yo era niño las cajas de ahorros hacían este tipo de cosas...


El volumen viene adornado por una franja en la que Roger Martin Du Gard (por delante) y Bernard Pivot (por detrás) exaltan las virtudes de la que, cabe suponer, autobiográfica obra de Chevallier. En la contraportada del libro piede leerse lo siguiente:

... ¡Le preguntamos qué hizo usted!
- ¿Sí?... Pues bien, estuve de marcha día y noche, sin saber adónde iba.
Hice ejercicio, pasé revistas, abrí trincheras, trasladé alambradas, sacos
terreros, vigilé en la tronera. Pasé hambre sin tener nada que comer, sed sin
tener nada que comer, sed sin tener nada que beber, sueño sin poder dormir, frío
sin poder calentarme, y piojos muchas veces sin poder rascarme... ¡Eso es
todo!
- ¿Todo?
- Sí, todo... O mejor dicho, no, no es nada. Les voy a decir la gran
ocupación de la guerra, la única que cuenta: HE TENIDO MIEDO.


Inmediatamente, he recordado las palabras que escribiera Louis-Ferdinand Céline en Viaje al fin de la noche y que no he olvidado desde las primera vez que las leyera, no en la novela - lo que haría más tarde - sino en el comic de Jacques Tardi, La guerra de las trincheras:


Hablando en plata, el campo nunca me ha gustado nada. Siempre me ha
parecido algo triste, con sus barrizales inacabables, sus casas siempre vacías y
sus caminos que no llevan a ningún lugar. Pero si a eso le añades la guerra, no
hay quien lo aguante.


Espero no demorar mucho la lectura de El miedo.

24 de abril de 2009

Ha muerto Jack Cardiff


Jack Cardiff, veterano director de fotografía británico, falleció el pasado día 22 de abril a los 94 años. Su carrera arranca con el cine mudo - en el cual da sus primeros pasos - hasta fechas más recientes. Son Michael Powell y Emeric Pressburger los que le ofrecen la oportunidad de debutar con A vida o muerte - A Matter of Life and Death - , colaboración que se repetirá con Narciso Negro - que le valdría su único Oscar - y Las Zapatillas Rojas. Cardiff ayudó a potenciar el efecto inventivo y estetizante de todos estos filmes. Su carrera continuó con una única colaboración con Hitchcock, posiblemente una de sus películas más excéntricas, Under Capricorn - aquí conocida como Atormentada -, contribuyendo posteriormente a crear un ambiente muy especial para Pandora and the Flying Dutchman -, dirigida por Albert Lewin y rodada en Tossa de Mar, población en la que se sigue recordando, incluso con una estatua en una privilegiada ubicación a su magnética protagonista, Ava Gardner -. También trabajó con Huston - La Reina de África -, con Mankiewicz - La Condesa Descalza (otro destacado protagonismo de Gardner y también de Bogart) -, con King Vidor - en su notable adaptación de Guerra y Paz -, con Laurence Olivier - El príncipe y la corista - o Richard Fleischer - Los vikingos -. Ya en los ochenta, colaboró varias ocasiones con John Milius - Los Perros de la Guerra, Conan el Bárbaro -.


Algunas coincidencias:


- Cardiff falleció el mismo día que lo hizo el director Ken Annakin - de quién ahora únicamente recuerdo (sin ninguna razón especial) Aquellos chalados en sus locos cacharros o El día más largo -; curiosamente ambos hábían coincidido en la película El quinto mosquetero.


- Otra anécdota menos lúgubre. Cardiff también hizo carrera como director. No recuerdo haber visto ninguna de sus películas. El caso es que la adaptación que realizara de Hijos y amantes de D.H. Lawrence le valió un Oscar a otro extraordinario director de fotografía británico, Freddie Francis.

10 de abril de 2009

In Memoriam - John Martyn

Perdonen la ausencia, pero por motivos personales mi ya escasa dedicación a este blog todavía se ve más disminuída. También se ve recortada la atención, el seguimiento a la actualidad cultural. Una buena muestra de ello es esta entrada. John Martyn - nacido como Iain David McGeachy - falleció el pasado 29 de enero. La inefable Wikipedia le define como "singer-songwriter and guitarist" y enlaza con el obituario de The Times, en el cual Martyn es definido como "an electrifying guitarist and singer whose music blurred the boundaries between folk, jazz, rock and blues". Una definición tal vez un poco tópica pero acertada. De ello es fiel testimonio la pieza que pongo a su disposición al finalizar estas líneas, escrita como un mensaje muy personal para Nick Drake, y que sirvió para titular el que posiblemente fuese su mejor disco. También recomiendo encarecidamente la versión en directo que registrara acompañado por Danny Thompson en Dublín en el año 1987. Igualmente, creo que merece la pena leer la interesante entrevista de junio de 1998 en The Wire. Una última recomendación más, especialmente para los desconocedores de la obra del escocés: el monográfico dedicado a John Martyn por Juan de Pablos en Flor de Pasión.