En
la obra de Tomine – brillante dibujante, como testimonian sus portadas para The New Yorker – es fácil rastrear las
influencias de Chris Ware o de Jaime Hernández, aunque también de grandes
cuentistas estadounidenses contemporáneos como, principalmente, Raymond Carver.
Podemos apreciar la sombra de éste en Vamos,
búhos, uno de los relatos que componen esta colección, en el que la
relación de una pareja se demuestra – demasiado - vulnerable al peso del
pasado. Antes, ha habido tiempo para que, en un formato de tira diaria, Tomine
nos muestre el nacimiento y fracaso de una nueva manifestación artística, la
“hortiescultura”, y el impacto que ésta tiene en su creador y en su familia:
tanto por ese mencionado formato, como por el tipo de humor, tampoco resulta
difícil emparentar esta historia con los Peanuts
de Charles Schulz, otra influencia manifiestamente reconocida. Una familia es
también la principal protagonista del posiblemente mejor relato de la obra, Triunfo y tragedia, en el que un padre y
una madre adoptan diferentes posturas
ante la pretensión de su hija de dedicarse a ser monologuista cómica.
Encontramos aquí el mejor ejemplo del trabajo del autor de Rubia de verano como el uso de la elipsis o el empleo de viñetas
estáticas y a la vez enormemente expresivas. Aquí, ese “mundillo” de cómicos en
ciernes en el cual se desarrolla la trama y esa convivencia en lo narrado de
humor y sordidez, seguro que serán del gusto de quien disfrute con Louis C.K.,
por ejemplo. Para esta muy cuidada edición en castellano, se ha escogido como
título el del relato que cierra el volumen y que está dedicado a Yoshihiro
Tatsumi, en el cual el protagonista, sin motivo aparente, vuelve a entrar –
repetidamente - en su antigua casa, cuando sus actuales propietarios no están
en ella. Se trata, pese a su brevedad, de un relato que se intuye muy trabajado,
especialmente por lo que respecta a la tensión que se respira y que va
aumentando de manera imperceptible. En conclusión, un trabajo plenamente
recomendable, bien representativo de su autor, quien ha alcanzado una
equilibrada madurez en todos los recursos que emplea.
Adrian Tomine, Intrusos. Sapristi. Barcelona, 2016.
(Nota: esta reseña se publica en el número del mes de noviembre de 2016 (n. 342) de la revista Ruta 66)