"La mayoría de nuestros amigos estaban solteros y ninguno tenía niños. Algunos envidiaban el embarazo y otros nos consideraban valientes, puede que estúpidos. No teníamos a nadie con quien hablar, ni modelos para saber cómo lidiaba la gente gente con los niños. Lo mencioné durante una partida de póquer, y un tipo me preguntó con sorna si me creía el primer hombre que iba a ser padre. No dije nada, porque la respuesta era que sí, que así era como me sentía exactamente. Sabía que se avecinaba un cambio drástico, y no había manera de prepararse para ello".
Chris Offutt, Dos veces en el mismo río. Traducción de Ce Santiago. Malas Tierras Editorial, 2022